AUGUSTO BARCIA TRELLES (Vegadeo (Asturias) 1881- Buenos Aires 1961). Jurista y político español. Licenciado en Derecho por la Universidad de Santiago de Compostela, se dedicó al ejercicio profesional de la abogacía y también a la docencia en dicha Universidad, aunque desde temprano mostró también una clara vocación política. Se distinguió por su oposición a la llamada “Ley Maura”, llegando a emitir varios dictámenes negativos redactados a instancias del propio Congreso de los Diputados. Próximo a Azaña, fue asesor compromisario de Acción Republicana e Izquierda Republicana, y como Letrado desempeñó la defensa del Presidente de la Generalidad Companys, después de los sucesos de Octubre de 1934. Tras ejercer el cargo de Embajador de España en Montevideo, obtuvo acta de Diputado por Izquierda Republicana en 1936 e inmediatamente después fue Ministro de Estado en los Gobiernos de Casares Quiroga y Giral. Tras la derrota republicana en la contienda civil, desempeña esa misma cartera en el Gobierno “de la esperanza” y sus gestiones en Naciones Unidas contribuyen al reconocimiento de numerosos países al Gobierno republicano en el exilio como legítimo así como a la emisión de la llamada “Nota Tripartita”. En 1948 se trasladó definitivamente a Argentina y ejerció la Cátedra de Derecho Internacional en la Universidad de Buenos Aires.

FERNANDO VALERA APARICIO (Madroñera (Cáceres) 1899- París, 1982). Político y escritor español, sobrino del escritor Juan Valera. Funcionario del Catastro, escribió asimismo sustanciales ensayos sobre política y filosofía del siglo XX. Fue miembro del Partido Radical-Socialista y comisionado de la ponencia constituyente en 1931. Asimismo, ocupó los cargos de Subsecretario de Justicia en el Gobierno de Martinez Barrio, Secretario de Estado de Obras Públicas con Casares Quiroga, Director General de Comunicación del Gobierno presidido por Largo Caballero, a la vez que renovaba su escaño de Diputado por Badajoz en febrero de 1936. Tras finalizar la Guerra Civil, trabajó intensamente en la oposición antifranquista del exterior y por la reinstauración de la República en España. Fue sucesivamente Ministro de Justicia, de Hacienda, de Negocios Extranjeros y Vicepresidente del Gobierno en diversos Gabinetes republicanos del exilio, y en 1962 fue Delegado de la República Española en la célebre Reunión de Munich en cuya organización intervino como miembro del Consejo Federal Europeo. En 1971, Maldonado le designó Presidente del Gobierno en el exilio hasta 1977, siendo así el último que ejerció dicho cargo. Como muestra de su pensamiento político escribió, además, las siguientes obras: "Evolución de España" y "Ni Caudillo ni Rey: República"